Las preferencias de un servidor, para un coche deportivo de razonable utilidad y 'driveability' (sin meternos en territorio 'supercar' fuera de alcance de nosotros los meros mortales, y sin tratar de los Wankel):
- 3 litros máximo de cilindrada.
- 4 cilindros.
- Turbocompresor.
Como diría mi buen amigo el Dr. Lecter: 'Simplicity, first principles'
Los cuatro en línea trepidan más que los L6, V6, V8 o V12, pero hasta 2 litros se puede aguantar sin problemas. Por encima de 2 litros el problema se torna serio, pero ya hace muchos años se inventó la solución: árboles contrarrotantes de equilibrado, que cancelan las vibraciones y permiten un cuatro pucheros de 3 litros de funcionamiento suave (como en los últimos 944).
Un cuatro en línea es compacto, ligero, fácil y económico de construir, entretener y reparar. Con 3 litros soplados se pondrá en unos 300 pencos, sin apretarlo demasiado. Un deportivo bien diseñado y en línea de peso tiene de sobra con 300 pencos (vive Dios).
Pero carece del glamour de un V6, un L6 o un V8.
No obstante, es de destacar que ni dos toneladas de glamour harán mejorar el 0-100 ni la velocidad punta



La polémica esta servida ...
